miércoles, 21 de mayo de 2014

HOY LA COSA VA DE SAIN




Ésta más o menos es mi opinión sobre SAIn (Solidaridad y Autogestión Internacionalista), que es una formación política que se presente a las elecciones europeas:

Desde una perspectiva católica, SAIn es junto con Impulso Social la formación política que objetivamente mejor compatibiliza su programa político con la defensa de los principios innegociables que establece la Iglesia. Cosa que además no sucede por casualidad, sino que obedece al hecho de que, en su mayor parte, los componentes de SAIn son católicos y éste es un partido que busca deliberadamente ajustarse a la enseñanza de la Iglesia.

Por lo que yo sé, SAIn está a favor de perseguir criminalmente el aborto, de derogar el matrimonio gay, de velar por el interés de los hijos impidiendo que adopten parejas diferentes de las que deberían haberles correspondido por naturaleza: que son las compuestas por hombre y mujer, de promocionar la familia natural apoyando económica y materialmente a las mujeres trabajadoras que quieran ser madres, y de no andar torpedeando la labor social de la  la Iglesia imponiéndole cargas tributarias que no se imponen a otros que, a diferencia de ella, no aportan nada a la sociedad que justifique que no se les cobren determinados impuestos (partidos políticos, sindicatos, etc.).

Creo que SAIn es un partido por el que un católico poco formado puede votar sin demasiados problemas de conciencia. Explico lo que quiero decir con eso. El gran problema de SAIn es que no se trata de una especie de "PSOE católico" (ni siquiera de la hipotética ala dura de dicho PSOE ficticio). Es una especie de mezcla entre IU, Equo y Podemos, solo que católica (o, por lo menos, respetuosa del catolicismo y con clara intención de no ofenderlo ni de buscar confrontación suicida con los mayores promotores de ese compromiso y esa justicia sociales que ellos aspiran a defender. Presumo que con toda sinceridad. Es decir, no pongo en duda la catolicidad y el compromiso de sus miembros con lo que ellos llaman "justicia social". Tampoco dudo de que ellos cfreen que su proceder es el más cristiano posible. Pero para mi está más claro que el agua que los católicos que componen ese partido son católicos que viven en el Mundo de Yupi.

Y para mí vivir en el mundo de yupi es inaceptable. ¿También para un católico? ¡Especialmente para un católico! Una fe sólida debería traducirse en ideas sensatas, siendo como era Cristo la misma voz de la verdadera Sensatez. Sin embargo, si bien la defensa que SAIn hace de los principios innegociables es irreprochable, en relación a cuestiones más terrenas (que, como es lógico, también tienen que tenerse en cuenta con motivo de una convocatoria electoral) sus postulados solo cabe definirlos como un montón de atajo de majaderías.

No es solo ya que no comparta sus ideas. Es que los puntos de vista a los que ellos se adscriben me parecen un cúmulo de insensateces sensibleras (Vg.: política de puertas abiertas a los inmigrantes, condonación de la deuda a las naciones pobres del Tercer Mundo, aumento de la ayuda que dedicamos al desarrollo -como si nos sobrase ahora mismo el dinero como para ir regalándoselo a otros países-).


SAIn es, como su propio nombre indica, un partido político que defiende ideas políticas internacionalistas -al respecto, creo que la imagen del niño negrito es bastante explícita-. Y por ende, aunque no vayan por el mundo echando pestes de la patria como un constructo burgués superestructural, no tienen lo suficientemente en cuenta que las naciones se parecen a las personas, y que igual que éstas no pueden ayudar a otras sin tener debidamente en cuenta su propio interés. Lo que además es más serio entre las naciones en la medida en que cuando se organizan como Estados disponen de un aparato que les permite cohesionarse para la guerra (que desgraciadamente, es un instrumento para alcanzar los fines geopolíticos de los Estados que no se ha abandonado y que probablemente nunca se abandonará, lo que obliga a estar prevenido contra la posibilidad de que te la declare, por ejemplo, una nación que se mostrase un tanto ingrata pese a una gran ayuda recibida en el pasado).

Pasando al plano de las finanzas, no es exagerado afirmar que el modelo económico que SAIn propone se basa en el ultraintervencionismo estatal y en la agresión indiscriminada contra los grandes patrimonios (esto es, en la imposición de cargas tributarias confiscatorias y en la regulación desmedida de prácticamente todos los sectores económicos por el Estado -con los consabidos efectos castrantes que eso generaría en nuestra economía y en la de cualquier país del mundo-). Es decir, que si no están influenciados por el marxismo y por la teología de la liberación (cosa que desconozco), parecen empeñados en hacer creer lo contrario.

En resumen, que su doctrina política me parece en muchos puntos basada en una comprensión un tanto simplona aunque no dudo de que bienintencionada del cristianismo. Y, por ende, un atentado contra el mismo. Que, sin duda alguna, no nace de la maldad ni del deseo consciente de hacer daño. Pero lo hace, aunque ni eso sea lo que quieren los que propulsan ese proyecto ni esa buena gente se de cuenta en verdad de lo que hace. ¿A quién puede sorprenderle? Y es que en verdad los peores desastres de la guerra a veces los provoca el "fuego amigo". Del cual dos cosas buenas, no obstante, se pueden decir de aquellos que lanzan el fuego amigo. La primera es que los daños infligidos a la causa común no los hacen movidos por ninguna mala intención. Y la segunda es que no solo desean arrojar los proyectiles contra el Enemigo. Muchas veces lo consiguen, contribuyendo de este modo a la Victoria. ¡Así que roguemos a Dios porque su participación en ésta sea lo mayor posible, maximizando sus grandes y minimizando sus errores!  IHS

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