miércoles, 22 de mayo de 2013

LO QUE PIENSO DE LAS AMENAZAS ABORTISTAS

A TODO EL QUE LE GUSTE LO QUE LEYERE, QUE LO DIVULGARA A TRAVÉS DE CUALQUIER MEDIO DISPONIBLE YO LE PIDIERE. ¡DIFUSIÓN ES PODER!

Aunque no es mi costumbre, hoy solo me limitaré a hacer un breve comentario a un artículo de otro autor, que no es otro que el (al menos de apariencia) joven Ricardo Latorre. Nunca lo he seguido mucho, pero hoy se ha lucido. Así que Dios se lo pague.

El enlace es el siguiente: http://www.intereconomia.com/blog/importante/amenazas-violacion-argumento-20130522


Artículo muy interesante que hace hincapié en una realidad de la que ya había oído hablar antes, y que parece que cada vez está más presente en el debate sobre ese mal despreciable que solo los insensibles o los monstruos son capaces de vender como conquista social: el gran mal del aborto. La realidad triste a la que hago referencias es la de las amenazas recurrentes contra aquellos que defendemos la vida y que creemos que no hay diferencia entre la vida humana dependiente del claustro materno y la vida humana independiente del mismo. Amenazas que ya no son solo de muerte, sino que últimamente van más allá. Cada vez es más frecuente enterarse de que un pagano abortista ha amenazado con violar a la hija de algún provida para que así éste se trague su oposición al aborto en caso de violación.

¡Desgraciados! ¡No somos tan necios como para culpar a esas pobres criaturas inocentes resultantes de esas hipotéticas violaciones del mal que haga la escoria humana que amenaza con llevar a cabo tal tipo de viles acciones! Escoria humana la antedicha que lo único que me inspira es repulsa mezclada con compasión. Dios les ayude, porque están enfermos del alma.

Me viene a la cabeza lo que le dice Liam Neeson a Jessica Lange en "Rob Roy". Por eso yo dejo bien claro que, si algún día algún cobarde de esos cumple sus amenazas, no será el niño el que haya de morir. Pero eso no significa que no tenga que morir nadie... Creo que, a tenor de lo que ya he escrito en entradas anteriores del blog, no es ningún secreto que yo soy muy favorable a la pena de muerte. Defender la vida y penar con la muerte, dos de las más poderosas razones que me mueven a reclamar la inmediata reforma de ese engendro jurídico, político y moral que es la aberrante Constitución que nos concedimos el día 6 de diciembre de 1978.


Un abrazo a todos los lectores, y que Jesucristo, el verdadero Dios, nos perdone y nos bendiga.

lunes, 20 de mayo de 2013

PANORAMA POLÍTICO ESPAÑOL (I). INTRODUCCIÓN

A TODO EL QUE LE GUSTE LO QUE LEYERE, QUE LO DIVULGARA A TRAVÉS DE CUALQUIER MEDIO DISPONIBLE YO LE PIDIERE. ¡DIFUSIÓN ES PODER!

Me parece ya muy lejano el momento en que escribí aquel primer artículo del blog (aparte de la presentación) en el que compartía con los lectores las esperanzas que me inspiraba el proyecto político que allá por esas fechas lanzaba Mario Conde: Sociedad Civil y Democracia (SCD). Aquello fue hacia el final de agosto de 2012.

Ya es mayo del año 2013. España sigue en manos de la casta política de siempre, anegada en el océano de corrupción rampante de los viejos oligarcas entronizados a raíz de la instauración de la Constitución que nos legó ese nefasto periodo de nuestra Historia que fue la Transición al juancarlismo. El Gobierno de Mariano Rajoy parece más exhausto que otro que hubiese durado tres veces más. No obstante, sigue aferrándose al cargo, luego no se ve que a quienes lo componen les haya sido de provecho esa lección que nos ha dado a todos Benedicto XVI al renunciar al ministerio petrino -en el que le ha sucedido el ya nuevo Papa Francisco- por falta de fuerzas. Sin duda alguna, las razones por las que nuestro actual Gobierno camina en el filo de la navaja son múltiples, y de muy distinto cariz unas y otras. Seguramente la más importante de todas es la que explica la misma exaltación al poder del PP. Ganaron por agotamiento del contrario, sin demostrar en ningún momento ser capaces de generar particular esperanza más que a los cuatro palurdos acérrimos que les seguirían votando aunque ordenasen el asesinato de toda su parentela (o precisamente por eso, que no hay que menospreciar el poder del masoquismo). El Congreso de los Diputados les dio su confianza, pero en ningún momento se han hecho acreedores de la confianza de la Nación, que no votó a Rajoy ni al PP, sino contra ZetaParo y contra el PSOE.

Eso ya debería bastar para entender porqué un Gobierno tan jóven -y cuya legitimidad, desde el punto de vista del propio sistema que aceptamos mansa e irreflexivamente el 6 de diciembre de 1978, es del todo indiscutible- parece morirse de esclerosis múltiple. Pero lo cierto es que Rajoy, digno sucesor de ZetaParo e indigno gobernante de una España en la que estoy seguro de que cree menos de lo que los españoles creen en él (y eso ya es decir), parece decidido a limpiar el recuerdo de su antecesor -a quien debe de apreciar más de lo que sugerían sus careos parlamentarios- batiendo todas sus marcas de desfachatez..., en la medida en que le deje una Alemania que quiere que le devuelvan su dinero y a la que le da igual qué excusas se pongan ahora por delante para no hacerlo al ritmo que ella quiere. De modo que el PP aparece en los últimos tiempos acorralado por todos lados. Ahí tenemos a Bárcenas, que con el asunto este de Gürtel y de la doble contabilidad pepera tiene agarrado en un puño a todo su antiguo partido; o a Mato, con su marido enfangado hasta el cuello en la trama antedicha. Las mentiras de Mariano Rajoy en prensa, diciendo que no sube los impuestos para luego subirlos el fin de semana. Los desencuentros entre De Guindos y Montoro (que parece que hubiera desposeído al anterior de su cartera). Las palabras despectivas de Alfonso Alonso hacia la Iglesia, demostrando lo poco que le importa el que los católicos practicantes o mínimamente firmes en su fe hayan sido hasta ahora votantes del PP. El espectáculo lamentable de Asturias, donde el PP desde 2010 en adelante ha tirado a la basura una Autonomía prácticamente segura. La cobardía demostrada por el Gobierno ante el desafío secesionista de Artur Mas en Cataluña. Las reiteradas e imbéciles declaraciones del peor ministro de este Gobierno, que es seguramente Margalló, reclamando constantemente la disolución de la nación española en el seno de una UE dentro de la que parecemos estar condenados a ser no más que una provincia periférica de segundo o tercer orden subordinada a los intereses de Berlín. En fin, no sigo haciendo la relación de los desastres provocados en este año y medio por el PP porque si no no terminaría nunca.

Sin embargo, el PP no es el único que en estos momentos está enfangado en el más deleznable lodazal de corruptela y falta de rumbo. Los EREs, el caso Faisán y los problemas con el PSC por su inestable postura en relación con la autodeterminación catalana tienen acorralado al PSOE. El primero de los casos citados IU. La familia de los Pujol, patrones del secesionismo en Cataluña, ha quedado a la altura de los Corleone (aunque sin el estilo que transmiten éstos en la célebre trilogía de Coppola). Los sondeos de opinión marcan un acusado retroceso de los dos grandes partidos, pero PP y PSOE siguen sumando más de la mitad del electorado..., peor aun, siguen ganando elección tras elección. Ahí está la mayoría absoluta reciente del pepero Feijóo en Galicia para demostrarlo, la resistencia del PSOE en su feudo andaluz, y la renovación -pese al relativo descalabro electoral- del mandato de Artur Mas en Cataluña (en donde CiU ha doblado en diputados a la segunda fuerza más votada).

Por si esto fuera poco, las formaciones que en los sondeos de opinión se benefician del descenso en la intención de voto para PP y PSOE no son precisamente las que yo diría que encarnan la renovación del sistema, sino más bien su perpetuación. Mismo perro con distintos collares. Rotos el azul y el rojo, lo sustituímos por el magenta de UPyD, o por el collar lleno de pulgas socialistas que es IU. Todo sea dicho, creo que el ascenso de UPyD no dejaría de implicar una mejora, en tanto que, pese a ser en sus políticas sociales (no tanto en las económicas) del tenor del peor PSOE, es un partido comprometido con la unidad nacional (terreno en el que, no obstante, peca de menosprecio hacia toda la pasada Historia de España y de adscripción al concepto francés de nación como mero contrato entre ciudadanos), con la lucha contra el terrorismo, y con el apoyo al exilio democrático cubano y la firmeza frente al totalitarismo castrista. En definitiva, que nunca recomendaría el voto a UPyD, pero que reconozco que me alegra que crezca a costa del PPSOE.

Resumiendo, que no crecen verdaderas alternativas que fomenten una auténtica enmienda a la totalidad de esta putrefacta ciénaga partitocrática en que se ha convertido España. Lo que es muy triste, porque la cosecha sigue siendo desoladoramente magra, pese a que difícilmente ha estado nunca la tierra tan abundantemente abonada como lo está ahora, razón por la que el que escribe entiende que podría esperarse otra cosa muy diferente y mucho mejor.

viernes, 17 de mayo de 2013

LOS PEPEROS MÁS AMIGOS PODRÍAN SER LOS MÁS IMPRESENTABLES

[Antes de leer este artículo, échenle un vistazo a este vídeo: https://www.youtube.com/watch?v=3QAekd5A1iI]

Esto dice Mayor Oreja:

http://digitalextremadura.com/not/37812/jaime_mayor_oreja___los_cristianos_tenemos_que_perder_el_miedo_al_que_diran_por_defender_nuestros_valores_/

Y esto le contesto yo a Mayor Oreja (y no solo a él):

¡No, hijo, no! En España y en el resto del mundo los cristianos lo que tenemos que perder es el miedo a abandonar a los PP de turno, que son partidos políticos desde los cuáles está demostrado que desde hace decenios es del todo imposible la defensa de los valores cristianos en la sociedad. No digo ya la expansión de los mismos. Que, aparte de ser su mejor defensa (¿qué mejor defensa que un buen ataque?), es el deber moral de cada cristiano, por ser la nuestra una religión universal y eminentemente proselitista (NOTA DEL AUTOR: mantengo lo dicho, pese a las palabras recientes del Santo Padre Francisco en relación al proselitismo -que me imagino estaba entendiendo en el sentido en el que lo practican las sectas protestantes y pseudocristianas de nueva generación-, y no en el sentido que le da la el diccionario de la RAE -y es que, al fin y al cabo, la infalibilidad papal no abarca las cuestiones lingüísticas-).

Jaime Mayor Oreja, que sepas que tanto tú como Vidal-Quadras sois lo más sospechoso políticamente hablando que existe en este país. Porque siempre os estais metiendo con vuestro partido, pero luego no solo no salís de él, sino que hasta tenemos que escuchar cómo Vidal-Quadras nos dice que él se siente cómodo en el PP, y que el que no se tiene que sentir cómodo es Montoro (lo que da que pensar, porque hasta ahora yo siempre creía que cuando te hacen ministro es porque tu partido y tu líder -que a fin de cuentas en este país vienen a ser exactamente lo mismo- te aprecian; y siendo Montoro evidentemente más apreciado en el PP que Vidal-Quadras, sorprende que el segundo se atreva a intentar convencernos de una majadería tan grande como la de pretender que él es el que está "cómodo" y el otro el que está "incómodo" en su ministerio).


En definitiva, que los motivos de vuestra actitud son francamente dudosos. Puede ser que penseis sinceramente las cosas que decís, pero que seais unos cobardes. Y que como tales cobardes prefirais la seguridad que porporciona ser parte, aunque ignorada, de un partido hegemónico como es el PP dentro de este sistema actual de PPSOEcracia. O puede ser que seais unos falsos de cuidado y que no penseis para nada las cosas en que decís que creeis. Y que por eso, pese a lo duro de vuestras críticas contra el partido, no se os eche. Porque servís de globos sonda mediante los cuáles conseguís mantener cautiva a la base católica practicante que constituye seguramente en torno al 20% de los votos del PP, evitando que constituyan una alternativa política independiente. Porque, al fin y al cabo, actuaríais sin hacer otra cosa que seguir las órdenes de esa misma directiva de la que os la pasais echando pestes.



Tampoco sería imposible que la verdad se sitúe en un punto intermedio, y que sea una mezcla de las dos tesis esenciales anteriormente expuestas. Aunque, con toda sinceridad, no veo el menor motivo para plantearme ni siquiera por un segundo que esa tercera alternativa sea posible. En relación con lo que aquí se habla, yo creo que lo más probable es que seais una cosa o toda la contraria. O bien católicos cobardes, o bien paganos disfrazados para confundir en materia política al rebaño del pueblo de Dios. En cualquier caso, un mal ejemplo para todos los católicos y para todos los hombres, y dos individuos indignos por tanto, en tanto permanezcan en esa actitud, de ser seguidos por nadie, y mucho menos por aquellos que al único al que tenemos que seguir es a Cristo mediante la fidelidad a su Santa Iglesia (que, todo sea dicho, en España no parece saber discernir muy adecuadamente los intereses de la Verdad que profesamos; como lo demuestra el hecho de que ponga la 13TV al servicio de los designios bastardos del enemigo -pues eso es el PP, que no es para nada un mal menor, sino más bien un enemigo tan feroz de la Iglesia como el mismo PSOE con el que tan perfectamente se complementa-).



De todos modos, es tristísimo tener que reconocer la aseveración que constituye el título del artículo y su conclusión final: que los peperos más amigos podrían ser los más impresentables de todos. Dios quiera que no lo sean, y que quien os escribe esté gravemente equivocado.

jueves, 16 de mayo de 2013

MALOS VIENTOS SOPLAN PARA OBAMA. BREVE REPASO A LA HISTORIA DE LOS IMPEACHMENT

A TODO EL QUE LE GUSTE LO QUE LEYERE, QUE LO DIVULGARA A TRAVÉS DE CUALQUIER MEDIO DISPONIBLE YO LE PIDIERE. ¡DIFUSIÓN ES PODER!

Malos vientos soplan para el Presidente Barack Hussein Obama. Cuando parecía que el escandalo motivado por el ataque yihadista al consulado americano en Bengasi se había diluído como consecuencia del transcurso del tiempo, recientes revelaciones hechas al respecto parecen desmentir la posición oficial que el Gobierno federal mantiene sobre lo que sucedió. En definitiva, que hay razones serias para creer que posiblemente el Presidente Hussein ha mentido al pueblo estadounidense. Cosa que en nuestra España la casta política hace todos los días sin que a nadie parezca importarle (ahí están, que los seguimos votando). Pero que en los EEUU en general suele parecerle muy mal a la gente, que es bastante más celosa de sus derechos que aquí (digo de aquellos entre sus derechos que de verdad importan; pues aquí nos manifestamos mucho, pero solo para que se mantenga el "panem et circenses", el cachondeíto de que seguimos creyendo erróneamente que nos hemos beneficiado durante las últimas décadas).

Por si todo lo antedicho os pareciera poco, se han juntado con el Bengasi-gate otros dos escándalos de cierta importancia. Uno relativo a escuchas a la prensa, pues según parece las comunicaciones de un gran número de periodistas fueron intervenidas por una agencia federal. Y otro relativo a espionaje fiscal y trato discriminatorio a organizaciones cercanas al Partido Republicano y al Tea Party.

Los escándalos de que hablo pueden prender una mecha peligrosa para el Presidente si éste no consigue desmarcarse de las actuaciones de sus subornidados de una manera convincente. Por primera vez desde que Hussein es Presidente parece ser que se escucha con fuerza la palabra "impeachment" (enjuiciamiento o destitución). No sería la primera vez que en los EEUU se hace uso de tan formidable mecanismo de control de los excesos del poder ejecutivo.

Ya en 1868 se votó la destitución de Andrew Johnson, Vicepresidente del gran Abraham Lincoln e indigno sucesor de éste en la presidencia. No se aprobó el impeachment por un solo voto. Anécdota graciosa que vale la pena contar relacionada con este suceso es que en aquel entonces, cuando un Vicepresidente cesaba en su cargo (por muerte, dimisión o ascensión a la Presidencia), no se nombraba a ningún otro Vicepresidente para que lo sustituyera. De manera que Andrew Johnson no tuvo ningún Vicepresidente que lo acompañase al frente de la Unión Federal. Por lo tanto, el que habría sustituído a Johnson en caso de que hubiese salido adelante el impeachment habría debido de ser el Presidente pro tempore del Senado, que entonces era Benjamin Wade. Wade estaba tan convencido de que Johnson sería destituído que hasta había nombrado su Gobierno. Así que no me quiero imaginar el careto que debió de poner cuando le anunciaron que, después de todo, no sería Presidente de los EEUU.

Posteriormente, algo más de un siglo después, el Congreso, a causa del célebre escándalo Watergate, decidió aprobar el inicio del proceso de impeachment contra Richard Nixon. Nixon, que ya había tenido que sacrificar a su Vicepresidente, Spiro Agnew (sustituído por Gerald Ford, el primer Vicepresidente de la Historia de EEUU no elegido directamente tras las elecciones para su cargo) consciente de que no había nada que pudiera hacer para evitar ser destituído por el Congreso, decidió dimitir para evitar la deshonra de pasar a la Historia como el primer Presidente estadounidense destituído de la Historia. No creo que hacerlo le ayudase en nada. Al fin y al cabo, ha pasado a la Historia como el único Presidente dimitido hasta la fecha. Fue sustituído por Gerald Ford (que de éste modo se convirtió en el único Presidente que ascendió al cargo sin haber sido formado parte del ticket presidencial votado por los ciudadanos en las elecciones). De todos modos, es interesante comprobar hasta qué punto el de Nixon no era un problema de popularidad. A diferencia de Andrew Johnson, que no había sido electo para su cargo por el Colegio Electoral, Nixon si había sido elegido por éste, habiendo ganado en 49 de los 50 Estados y con casi un 61% de apoyo popular. El dato no solo es interesante, sino que lo cito para que entendamos que el propio Hussein, que es el que motiva la presente entrada del blog, ya querría para si un apoyo popular de tamaña magnitud. Bueno, él y cualquier candidato presidencial estadounidense desde los días posteriores al gran Ronald Reagan.

El último impeachment que ha tenido lugar hasta el momento presente en los EEUU fue el que se dirigió en 1999 contra Bill Clinton. Lo cierto es que, aunque se llegó a la votación, el Presidente no corrió peligro real de ser destituído, y sus oponentes se quedaron muy lejos de conseguir la cifra de votos requerida para apearlo del Despacho Oval. Mis sentimientos respecto de aquel impeachment están un tanto encontrados. Por un lado, creo que Clinton merecía ser destituído (igual que Nixon; mientras que el caso de Andrew Johnson me despierta no pocas dudas, aunque creo que también habría sido conveniente destituirlo). Cometió perjurio y obstrucción a la Justicia. Y lo peor del caso es que esto es algo que reconoció con posterioridad a su salida del cargo. Objetivamente merecía ser destituído de su cargo, porque su palabra carecía de todo valor. Y el solito se lo buscó. Porque lo de la Lewinsky, por si solo, no servía para destituirlo, por inmoral o no que nos parezca. Pero en el momento en juró decir la verdad, solo la verdad y nada más que la verdad con la ayuda de Dios para acto seguido hacer todo lo contrario, en ese momento demostró que, igual que ese juramento no tenía valor para él, tampoco había razón para suponer que el juramente que prestó para acceder a su cargo le pareciera más valioso.

Sin embargo, es cierto que en caso de que Bill Clinton hubiera sido destituído, el Vicepresidente Al Gore habría asumido su lugar como Presidente. De manera que su nombre habría figurado junto al de los otros 42 ocupantes de la Casa Blanca que lo precedieron. Puede que luego Bush lo hubiese derrotado igual. Pero creo que el de figurar entre los Presidentes de EEUU es un honor que Al Gore ciertamente no merecía (ideológicamente hablando parece una especie de anticipo de la radicalidad ultraestatista que llegaría al poder de la mano de Hussein el liberticida).

No se si se dará inicio a un procedimiento de impeachment contra Hussein. Si se dos cosas. Una, que si se inicia tal procedimiento espero que sea para que el Congreso lo lleve hasta las últimas consecuencias y destituya al Presidente. Y dos, que si el Presidente es cesado me gustaría que lo sucediese en su alto cargo el republicano John Boehner, mejor que el demócrata Joe Biden. Contra el que bien podría iniciarse también proceso. Al fin y al cabo, si Hussein sabía lo que hacían sus subordinados, ¿no iba a saberlo su leal Vicepresidente?