martes, 25 de noviembre de 2014

¿HASTA DÓNDE PUEDE LLEGAR EL BOL(UDO)CHEVISMO? (I)

La verdad es que llevo algunos días preocupado pensando en el cáriz que en los últimos tiempos están tomando los acontecimientos en España. Ya es bastante malo haber soportado durante todas las décadas que han seguido a la muerte de Franco un "consenso socialtontócrata" probablemente todavía más acusado que el que tienen que sufrir las demás naciones del continente europeo. Imaginaos entonces lo que podría suponer para nuestro país el ascenso del BOL(UDO)chevismo en su versión BOL(UDO)ivariana... Y eso sin contar con el perpétuo pulso que desde la aprobación de nuestra fatídica Constitución en 1978 le están echando al Estado Central los separatistas de las regiones díscolas vasca y catalana (que parece que va camino de ampliarse a Galicia, Navarra y quién sabe si incluso alguna otra Comunidad Autónoma más).

Por el contrario, los partidos que desde mi punto de vista convendría más que fueran ganando posiciones están bien ganándolas a un ritmo demasiado lento y sin terminar de dar un salto nacional (C's), bien perdiéndolas declaradamente aunque sin llegar a la ruina total (UPyD), bien sin terminar de hacer cuajar un proyecto político competitivo capaz de hacerse aunque solo sea con representación parlamentaria (VOX, PxL), o bien reducidas a la impotencia y a la marginalidad política declarada (AES, CTC, PFyV, FE de las JONS). De los citados, yo solo me planteo votar, llegado el caso, a VOX o a PxL. Pero eso no quita para reconocer que no me desagradaría que los otros ganaran posiciones, siempre y cuando fuera a costa de las formaciones políticas por las que siento absoluta hostilidad.

El caso es que desde las europeas no es posible negar que PODEMOS se encuentra en un momento dulce, y que su ascenso está siendo vertiginoso. Esperemos que esto no dure, y que su progresión se atenúe de aquí a las próximas elecciones generales, pero el caso es que eso es lo que hay. De nada valdría negarlo. PODEMOS puede llegar a ganar las elecciones, e incluso a alzarse con el poder en España. Los últimos sondeos apuntan a que buenamente podría ser así.

En las europeas de mayo su éxito fue notable, por inesperado. Pero, si se analizan fríamente los datos, PODEMOS estaba a un mundo de poder desafiar a PP ni a PSOE. Desde entonces, su crecimiento ha sido cosa exponencial. Pronto han ido escalando posiciones. Desde el primer momento han usurpado una tercera plaza que no obtuvieron en las elecciones europeas (en las la lista de Pablo Iglesias Turrión de Suchard quedó en cuarto lugar). Casi inmediatamente después, las encuentas han señalado que PODEMOS se convertiría en una tercera fuerza como jamás había existido en España, aunque todavía estaba a gran distancia de PP y PSOE. A continuación, ha empezado a disputarle al PSOE la segunda plaza, amenazando con relegarlo a la tercera posición -salvo para "El País", que ha intentado echarle un capote al decadente partido del Pablo Iglesias original y que hasta hace nada todavía era capaz de publicar encuestas que dan ganador al PSOE en las próximas elecciones-. A las semanas, la segunda posición de PODEMOS era un hecho, aunque todavía no parecía fácilmente amenazar al PP. No obstante, no han tardado nada en alcanzarlo y superarlo en términos demoscópicos, y la pregunta es si ahora que están en cabeza abrirán o no brecha y consolidarán su posición.

Es verdad que no resulta nada fácil dar por hecho que, cuando llegue el momento de la verdad electoral, PODEMOS consiga los resultados que ahora mismo le auguran la generalidad de las encuestas (sobre todo porque probablemente exista bastante voto oculto del PP, acabará votándolo aunque sea a costa de ponerse una pinza en la nariz). Igual que su mayor triunfo hasta ahora fue la campanada de las europeas, su mayor riesgo quizá sea pecar de triunfalismo y sufrir una auténtica decepción en las generales. Algunos sugieren que la demoscopia está inflando deliberadamente a PODEMOS para que sus resultados electorales, por buenos que sean analizados objetivamente, sepan a poco y la gente que apoya ese proyecto se desilusione, de tal manera que PODEMOS se deprima y acabe relegado al rol de tercer partido que en el pasado han ejercido CDS o IU.

Me temo que no es probable que eso sea lo que suceda. Es más, temo que PODEMOS aumente aún más su fuerza de aquí al momento en que se celebren las elecciones (que está claro que solo puede ganárselas el PP). Sean cuales sean los resultados, y con independencia de que PODEMOS conquiste el Gobierno o tenga que permanecer en la oposición (alternativa que yo considero la más plausible, dado que al propio Pablo Iglesias dudo que le interese gobernar sin una mayoría parlamentaria que le permita hacer salir adelante sus demenciales políticas), no creo que PODEMOS se lleve una decepción seria ni siquiera en el peor de los casos.

Desde luego, si de verdad existe una estrategia en virtud de la cual PODEMOS esté siendo inflado artificialmente, se me antoja poco probable que tal estrategia (cuyo sentido sería movilizar el voto del miedo a PODEMOS en favor de PP y de PSOE) conduzca a salvarle el trasero al sistema. Más bien al contrario. Con PODEMOS puede empezar a suceder lo que jamás ha sucedido ni con CDS ni con el PCE/IU, ni tiene visos de suceder con UPyD, C's o VOX. Mientras PODEMOS fuera sensiblemente detrás en los sondeos del PSOE (su principal competidor, habida cuenta de que a IU la va a reducir a una posición testimonial -si es que no se la come del todo-, y lo que queda de ésta mendiga del modo más lastimero posible un pacto con PODEMOS), probablemente se seguiría invocando el "voto útil" al PSOE, en tanto que única formación política capaz de disputarle la hegemonía al PP. Esa siempre ha sido la gran barrera que las otras formaciones políticas nunca habían sido capaces de sortear; y que impedía que su crecimiento electoral caminase parejo a la simpatía que despertaban entre el electorado.

Con PODEMOS existe el riesgo no solo de que el "voto útil" no le quite votos, sino también de que se invierta y se los dé. Si PODEMOS sigue progresando, llegará un punto en el que en lugar de que un tipo que simpatiza con PODEMOS vote al PSOE porque es el partido que gana, sean tipos que simpatizan con el PSOE los que voten a PODEMOS por ser la única formación política capaz de hacerle frente al PP. Y es que el caballo ganador siempre atrae. Es verdad que en si así ocurriera el "voto útil" no podría generar un efecto tan fuerte como en la hipótesis inversa (la moderación atrae más fácilmente a los radicales que la radicalidad a los moderados -si bien es verdad que el PSOE, en lo que son sus bases, es un partido político bastante radicalizado-).

Igual no estoy convencido de que la demoscopia infle desmesuradamente a PODEMOS. Para empezar, si esa fuera la intención, no se comprenderían sondeos como el del Gobierno navarro recién salido del horno. Según dicha encuesta, PODEMOS -que en Navarra no tiene candidato, ni caras conocidas, ni estructura, ni nada de nada- se alzaría con una pasmosa victoria electoral que la catapultaría hasta los 18 parlamentarios, de 50 posibles. ¿Dónde quedarían UPN y el PP? Pues UPN sacaría 8 escaños, y el PP solo 1. Lo que hace un total de 9. La segunda fuerza política sería BILDU/ETA, con 11 escaños (y a gran distancia, como se vé, de PODEMOS). El PSOE sacaría 5 escaños; Geroa Bai, 4 escaños; IU, 2 escaños; y UPyD, un solitario escaño al igual que el PP. En definitiva, que el único Gobierno posible sería el de PODEMOS con la banda terrorista con la que, al fin y al cabo, tan bien se lleva.

(NOTA: Pablo Iglesias, antes de ser famoso, ha dado mítines en herriko tabernas, de manera que hasta cierto punto no debería sorprender que le fuese fácil llegar a un entendimiento con esa gente. No obstante, tampoco debería sorprender lo contrario, dado que el marxismo es teóricamente internacionalista -y desecha las naciones, que considera meras construcciones burguesas sin otro propósito que el de servir de herramienta para la opresión del proletariado, que no tiene otra patria posible que su propia dictadura-. Así pues, la propia teoría marxista podría predisponer hasta cierto punto a PODEMOS contra los separatismos, por más que de palabra no hay duda de que siempre manifestara su respeto por el principio de autodeterminación de los "pueblos" vasco y catalán. En definitiva, que no es imposible que el mayor peligro político directo que exista en este momento para la hegemonía separatista en las Vascongadas y en Cataluña -y en menor medida también en Galicia- sea el ascenso de un PODEMOS en cuya visión de una "España roja" sería muy posible que no hubiera lugar para una "España rota").

Ahora bien, lo interesante del sondeo no son los resultados que arroja, sino el lugar donde arroja esos resultados: nada más y nada menos que en Navarra, que siempre ha tenido una importante base social más tradicionalista que la media de España -no en vano los requetés navarros fueron claves a la hora de explicar el rápido triunfo que el Alzamiento Nacional obtuvo en tierras navarras, y la posterior victoria de Franco en la Cruzada; razón por la que Franco mantuvo el Concierto económico con Navarra-.

Si PODEMOS es capaz de alzarse con un triunfo tan abultado y resonante en Navarra -y ya van dos sondeos de elecciones generales que también apuntan en esa dirección, aunque otorgando menores márgenes de victoria a PODEMOS-, entonces es capaz de disputar por lo menos la segunda plaza y por tanto de obtener representación en todas y cada una de las provincias de España. Lo que es de la mayor importancia, en la medida en que las provincias en las que de verdad se deciden cuáles serán las fuerzas mayoritarias del país son las rurales, enormemente sobrerrepresentadas en virtud de un sistema electoral que les otorga un mínimo de dos diputados a cada una, uno a Céuta, otro a Melilla, más luego otros 248 a repartir proporcionalmente en base a la población de cada territorio. Lo que significa que en muchas provincias del país que eligen 3 ó 4 diputados, las dos primeras fuerzas políticas son las únicas que entran en el reparto, y ser tercera fuerza difícilmente puede servirle a nadie de nada. En definitiva, que si PODEMOS consigue superar al PSOE en las provincias rurales (en la mayoría de las cuales el triunfo pepero se prevé prácticamente seguro), PODEMOS puede subir exponencialmente a la vez que el PSOE se arriesga a caer todavía más bajo de lo que ya ha caído.

Y este fenómeno, unido al del posible "voto útil" de las bases más radicales e incluso de moderados muy antipeperos del PSOE a PODEMOS si se mantiene el aura triunfal de ésta; es otro de los que hacen factible que PODEMOS obtenga la victoria en las próximas generales, e incluso que lo haga por un margen superior al que de momento se atreven a pronosticar las encuestas. Cosa que sería muy de lamentar, aunque quizá no tanto como podría parecerlo a primera vista.

Me explico. PODEMOS es una formación radicalmente libertoclasta, que en verdad profesa un marxismo básico, flexible en las formas, pero resuelto en el fondo. Si alcanzan el poder, no hay duda de que cercenarán enormemente todas las libertades que esté a su alcance atacar (sobre todo las de índole económico y educacional). Muy probablemente, eso les enajene a una parte no excesivamente grande de su base electoral; cosa que, lamentablemente, siempre podrán compensar atrayendo a sus filas a otra gente, y haciendo buen uso de la táctica de la victimización, a la que recurren normalmente los totalitarios en apuros cuando sus regímenes empiezan a hacer aguas económicamente hablando, a fin de salvar apoyos. Le echarán la culpa a todo el mundo sin reconocer jamás poder haber cometido errores más que de detalle, nunca de bulto ni imputables a posibles errores de la patética patraña en que consiste su hedionda ideología política.

No obstante, un Gobierno de minoría de PODEMOS seguramente desgastaría mucho a esta formación. Tendría dos caminos: romper los consensos básicos de la transición así como si tal cosa, o amoldarse a ellos. Es dudoso que se atrevieran a emprender la primera vía, porque eso podría enajenarles a muchos y granjearles la hostilidad de gran parte del país. La segunda alternativa tampoco es mucho mejor, porque seguramente PODEMOS no podría dar un paso sin el consentimiento del PSOE. Y es que, pase lo que pase, es casi seguro que la suma PSOE-PP sumará mayoría absoluta, y podría bloquear muchas de las más agresivas iniciativas de un hipotético Gobierno de PODEMOS.

Pese a todo, tampoco soy demasiado optimista. El PSOE no es un partido socialtontócrata europeo normal que, pese a la tontuna, conserve un mínimo sentido de con quién es lícito y con quién no es lícito pactar mayorías parlamentarias. De todos los partidos europeos de ese jaez, es sin duda alguna el más tontócrata de todos; y encima tiene un pasado BOL(UDO)chevique manifiestamente no superado. No olvidemos que a ese partido perteneció el único español al que antes de Pablo Iglesias había nadie comparado con Lenin. En definitiva, que lo veo capaz de pactar con PODEMOS. No dudo de que se plantearía seriamente hacerlo si por un casual los BOL(UDO)cheviques quedaran detrás de ellos en las elecciones. Mas es que lo que yo creo es que se lo pensarían incluso si PODEMOS quedara delante y fuera a Pablo Iglesias y no a PDRO SNCHZ a quien hubiera que investir Presidente del Gobierno. Que nadie espere un Frente Democrático que procure bloquear el ascenso de PODEMOS. Para que eso fuera posible, el PP y el PSOE tendrían que empezar por convertirse en los partidos democráticos que no son propulsores de un sistema democrático que en este momento no existe en España.*

*Ver al respecto lo que dejé escrito en los siguientes artículos: http://lascronicassertorianas.blogspot.com.es/2012/08/algunas-ideas-personales-sobre-la.htmlhttp://lascronicassertorianas.blogspot.com.es/2012/08/algunas-ideas-personales-sobre-la_30.html y http://lascronicassertorianas.blogspot.com.es/2012/08/como-conseguir-una-democracia-de-minimos.html

Así pues, que PODEMOS gane no es impensable. Y que el PSOE le permita gobernar y tienda a ponerse de su lado tampoco. En verdad, tendemos a olvidar que Pablo Iglesias es tan hijo político de José Luis Rodríguez Zapatero como PDRO SNCHZ. Olvidamos que ese sujeto gobernó España hasta hace menos de tres años, y que no se trató precisamente de un Presidente del Gobierno normal, sino de un fanático que presumía de "rojo". El hecho de que su sucesor le esté haciendo "bueno" no significa que lo fuera (baste recordar que en 2008 fue reelegido con el voto de lo peor de lo peor del país -proetarras y demás filoterroristas incluídos-). Así pues, si el PSOE ha sido capaz de devastar España como lo ha hecho por sí solo, no hay que descartar que pueda hacerlo en compañía de otros. Pablo Iglesias no creo que sea muchísimo peor de lo que podría serlo ahora mismo Zapatero si tuviera quince años menos y ascendiera en este momento al liderazgo del PSOE. El mismo Presidente que aprobó con el PP el segundo apartado del art. 135 de la Constitución Española seguramente estaría solicitando la abrogación del mismo. Allí donde PDRO SNCHZ consigue que sea evidente que intenta fingir -mal que bien- ser más de PODEMOS que el propio Pablo Iglesias, ZP conseguiría hacerlo de manera convincente. Ni siquiera tendría que fingir.

Ahora les dejo. Ha quedado claro lo que pienso en cuanto a la posibilidad nada halagüeña de que PODEMOS ganara unas elecciones generales. En algún artículo próximo entraré a opinar acerca de lo que podría suponer un Gobierno encabezado por esta deleznable formación política. Hasta entonces, vayan todos los lectores en paz. IHS